lunes, 24 de noviembre de 2014

Vida y Obra de Críspulo Gándara

















Comenzó de hojalatero
continuó como cantor
se convirtió en payador
y marcaría el sendero.

Nacería en Concepción
en mil ocho ochenta y tres
nunca sería un revés
su precaria educación.
Críspulo con gran tesón
se procuró con esmero
como buen hijo de obrero
trabajó con sus dos manos:
el mayor de doce hermanos
comenzó de hojalatero.

Gustaba de la guitarra
junto a otros guitarristas
hicieron banda de artistas
para amenizar la farra.
Se gana la buena barra
de público y auditor
un amigo bienhechor
le aconseja que se vaya:
a Santiago su chupalla
continuó como cantor.

Conformó gracias a dios
"Los Huasos de Pichidegua"
con los discos no dan tregua
y graban ochenta y dos.
Prosiguió cantando en pos
del huasito labrador
no del burgués impostor
que de huaso se disfraza:
se volvió para su casa
se convirtió en payador.

Regó la octava región
con picardía y sus tallas,
improvisando las payas
mejores de mi nación.
Desde la U de Concepción
mostró con tino certero
su talento verdadero
como diestro payador:
de Chile fue el ganador
y marcaría el sendero.

Finalmente terminó
con menos éxito que antes
intentó con restorantes
pero no le resultó.
El Congreso le entregó
un homenaje tardío
a un sólo mes que el vacío
le llegara a su existir:
porque en Chile hay que morir
para ser reconocío.

fuente:

Francisco Viveros
Ruta 5, viernes 21 de febrero de 2014.
 http://lairapopular.blogspot.com/2014/02/vida-y-obra-de-crispulo-gandara.html

El Huaso según Críspulo Gándara



Hasta el advenimiento al canto chileno de este rey de la talla y la paya, no se acostumbraba en los discos a interpretar este estilo, por el temor existente entre los directores de los sellos grabadores de que tales registros cayeran mal entre el público "culto" que los compraba.

Cuando Críspulo Gándara fue llamado a grabar algunos discos para el sello Odeon, insinuó la conveniencia de "adornar" sus cuecas con algunas tallas de su cosecha. Por supuesto que le fue terminantemente prohibido cometer tal desaguisado. Sin embargo, luego de algunas pruebas, Gándara demostró que nada había de malo ni lesivo a los oídos de los que compraran las grabaciones, salvo si se considerara fuera de gusto la picardía criolla.

El  huaso según Críspulo
Críspulo Gándara nació en 1883. Era hijo de un obrero de modestos recursos, quien sólo pudo dar a su hijo una precaria educación, ya que había otros doce hermanos por quienes velar. La infancia de Críspulo no fue, pues, de las más dulces. Comenzó a ganarse la vida a los doce años como aprendiz de hojalatero, trabajo que desempeñó hasta la hora de su muerte y que alternaba con la música.

El campo, su lugar natal, le atraía; no había fiesta en que no estuviese presente el joven artista. Con otros muchachos guitarristas y cantores formó sus primeros conjuntos, amenizando toda fiesta donde fueran invitados, las más de las veces sin paga. Cierta vez que alguien lo oyó en estos menesteres le sugirió la conveniencia de trasladarse a Santiago para mostrar su trabajo, ya que lo que él hacía (cantar, tocar la guitarra y payar) era desconocido en la metrópoli. Por entonces los pocos discos de música chilena que se escuchaban venían de Estados Unidos y Argentina, y no mostraban lo que Gándara podía hacer. Su trabajo, pues, era novedoso.

Cuando el músico llegó llegó a Santiago debutaba un conjunto llamados Los Cuatro Huasos. Pero aquellos no eran huasos, "eran hijitos de sus mamás que disfrazados de huasos cantaban": ésos serían más o menos los pensamientos de Gándara cuando vio al conjunto en el Teatro Dieciocho, según relatarían luego algunos cercanos. El músico creó sus propios conjuntos. Los Huasos de Pichidegua y Los Trovadores de Arauco fueron los dos más importantes que organizara y dirigiera Críspulo Gándara y que trascendieron los estudios de grabación, con los cuales paseó nuestra música por todos Chile y gran parte de América del Sur.

En 1932 el sello Odeon comenzó a grabar discos en Chile y los huasos de Gándara fueron los primeros en su género en pisar un estudio de grabación. La Odeon deseaba contrarrestar la creciente popularidad de Los Cuatro Huasos (más tarde contrataría a los mismos Cuatro Huasos, pero bajo el nombre de Los Huasos de Ahumada, a fin de eliminarlos del catálogo de la Victor, estrategia que no fructificó).

Se hundió el Transporte Angamos: el vals como tragedia
Los Huasos de Pichidegua grabaron más de ochenta discos, cantidad importante para aquellos tiempos. Sin duda el tema que les abrió la puerta de la celebridad fue aquel que hablaba de una tragedia marítima que sobrecogió a los chilenos: el hundimiento del vapor Angamos. Tal fue el éxito de "El hundimiento del Angamos" que la Odeon obsequió a Gándara un automóvil, lujo que ningún músico popular podía darse por entonces. Desafortunadamente el artista no hacía del dinero una pasión, y todo lo que ganaba lo derrochaba a manos llenas en su generosa bohemia.

Cuando el trío de los Huasos de Pichidegua se separó, el payador formó otro conjunto bajo el nombre de Los Trovadores de Arauco, y que si bien no tuvieron la resonancia de sus antecesores, fue un grupo preponderante en nuestro medio. Sus integrantes eran Elías Bologini, Montenegro y el propio Gándara, y conocieron sus mejores épocas hacia fines de los años '30. Artísticamente estaban mejor dotados que Los Huasos de Pichidegua, pero también existía por entonces mucha más competencia en grupos como Los Quincheros y Los Provincianos, que eran los dos mejores de los años '30 y '40, por no nombrar a Los Cuatro Huasos, que estaban entrando en el ocaso de su arte.

Hacia 1945 Críspulo regresó a su querida tierra sureña y se instaló en algunos negocios, producto de lo que había logrado salvar de su bonhomía. El 10 de junio de 1971 los diarios publicaban la noticia de un homenaje rendido a este artista en Concepción, en el que se le otorgaba una pensión de gracia en reconocimiento del Congreso "por cuanto había hecho por la poesía popular y nuestro folclore, y como un galardón bien merecido por los ochenta y dos discos en que grabara payas y cantos de Chile".

Más abajo la crónica continuaba con una premonición: "Ojalá no tarde demasiado esta recompensa que don Críspulo se ha ganado con creces y que muy pronto se haga efectiva para satisfacción y tranquilidad de este viejo payador, que tanto nos ha dado con su talento y acendrada chilenidad". Pero la recompensa llegó tarde, pues el 5 de julio de ese mismo año moría Críspulo Gándara, el último auténtico payador chileno.

fuente:  Juan Marino Cabello / Eva Martinic.(http://www.musicapopular.cl/3.0/index2.php?op=Artista&id=1528)

CRISPULO GANDARA, CANTOR POPULAR Y PAYADOR.



En la Octava Región, en la novel comuna de Hualpén existe una población que lleva su nombre, y no podría ser de otra manera, don Críspulo era pueblo, y se eterniza en el corazón de un grupo habitacional que es pueblo. La población Hualpencillo, que es la base de la nueva comuna nace para albergar a muchas familias humildes de la zona de Concepción después del terremoto de 1960.

Los individuos que dicen representar al pueblo se vuelcan esquizofrénicamente en busca de nombres foráneos para perpetuarlos en poblaciones, nuevas comunas, infraestructuras viales, sanitarias, postergando el nombre y la obra de nuestros connacionales que tienen méritos más que de sobra para ser reconocidos, a modo de ejemplo, bautizaron el nuevo puente carretero sobre el río Biobio como “Juan Pablo II”, méritos puede tener este señor para su grey, ¿pero para la zona?, bien podría llamarse puente Críspulo Gándara, como un símbolo de la unión entre el canto campesino vernáculo y la ciudad, pero una vez más se demuestra que Chile no es de los chilenos.

Críspulo Gándara nació en 1883. Era hijo de un obrero, por consecuencia, de limitados recursos económicos, lo que obviamente redundó en el hecho que el joven Críspulo tuviese una paupérrima educación, más si él era uno de los doce hermanos que tuvo.

A los doce años comenzó su vida laboral como aprendiz de hojalatero, oficio que mantuvo toda su vida y que combinaba con su pasión, la música.

Hasta el advenimiento al canto chileno de este rey de la talla y la paya, no se acostumbraba en los discos a interpretar este estilo, por el temor existente entre los directores de los sellos grabadores de que tales registros cayeran mal entre el público "culto" que los compraba. Cuando Críspulo Gándara fue llamado a grabar algunos discos para el sello Odeón, insinuó la conveniencia de "adornar" sus cuecas con algunas tallas de su cosecha. Por supuesto que le fue terminantemente prohibido cometer tal desaguisado. Sin embargo, luego de algunas pruebas, Gándara demostró que nada había de malo ni lesivo a los oídos de los que compraran las grabaciones, salvo si se considerara fuera de gusto la picardía criolla.

Con otros amigos guitarristas formó sus primeros conjuntos, fue así como se transformó en un muy solicitado amenizador de fiestas y eventos, y así como en estos tiempos, también en su época de joven, le invitaban por casi nada de paga y muchas veces solo por las gracias.

Su fama de cantor, tocador de guitarra y payador fue difundiéndose hasta ser aconsejado para que emigrara a la capital y así mostrar la música chilena que por esos años se difundía a través de la radio con grabaciones venidas desde el extranjero, hecha por personas que del campo solo conocían su definición en los diccionarios.

Su estilo y temática era muy diferente, por esa fecha de su arribo se anunciaba con bombos y platillos el lanzamiento del conjunto “Los Cuatro Huasos”, jóvenes con mucho entusiasmo pero eran citadinos, Don Críspulo, según antecedentes, los vio actuar en una presentación que hicieron en el Teatro Dieciocho.

Se da a conocer como compositor en 1927, entre sus canciones mas conocidas están “Corazón de Bandido”, "Como el trinar del jilguero". "El tonto del hueso", "Pobre loca”, “El Hundimiento del Angamos", "Tu pobre negro jetón", en el Derecho de Autor hay registrada más de 65 canciones de su autoría.

Gándara formó dos conjuntos, Los Huasos de Pichidegua y Los Trovadores de Arauco, entre otros conjuntos, estos fueron los más importantes y de ellos hay algunas grabaciones del sello Odeón que dan fe. Estas grabaciones son de la década del 30, pero según relatos al respecto señalan que el sello Odeón le dio la oportunidad a Críspulo Gándara sólo para hacer un contrapeso a la popularidad de los Cuatro Huasos que grababan para el sello RCA Víctor.

Según informes de la época, Gándara con los Huasos de Pichidegua grabaron cerca de un centenar de discos, siendo el vals “El Hundimiento del Angamos” su tema identificatorio, al punto que fue record de ventas para esos años.

Una vez que se terminó los Huasos de Pichidegua, formó el conjunto Los Trovadores de Arauco, pero no tuvieron la relevancia que el conjunto anterior, además en el medio ya habían aparecido otros conjuntos como Los Provincianos, Los Quincheros y otros de menor nombradía, eso era ya en la década del 40.

A mediado de la década del 40 decide regresar a la zona de Concepción, de donde no se movió hasta el día de su muerte, mezclando su oficio de hojalatero y el canto, fue derivando hacia lo que en definitiva se le recuerda con mas fuerza, la paya, siendo reconocido por todo el mundo del canto popular como el mas grande entre los grandes, en el “Encuentro de Payas” que se realizó 13 de Noviembre de 1965 en la casa del Deporte de la Universidad de Concepción, fueron varios los payadores que se rindieron ante el ingenio y creatividad de Gándara, siendo Lázaro Salgado el último en rendirse ante el maestro, sin antes dar una resistente batalla de versos.

Las crónicas de la época señalan que uno de los primeros encuentros de paya importante los tuvo en el año 1922 frente a un payador argentino de apellido Bertollini, del cual años después don Críspulo señalara a modo de confidencia que el argentino ha sido uno de los mejores payadores que me he enfrentado.

En el año 1967 fue invitado a ser parte del elenco del film “Ocaso”, película de Hernán Takeda y que contó con las actuaciones de Gabriel Alfaro. Oriana Espinoza, Carmen Varas, Mario Simonetti, Críspulo Gándara, Sergio Burger, Carol Vera Y Blanca Parra.

En 1971 recibió una pensión de gracia, otorgada por el Congreso como reconocimiento a la contribución a la poesía popular y nuestro folclore, y como un galardón por los ochenta y dos discos en que grabara payas y cantos de Chile.

Y como sólo ocurre en Chile, de la pensión solo disfrutó del homenaje que le hizo la ciudad, pues a los pocos meses, el 5 de julio de 1971, muere el auténtico payador chileno.

fuente: EL TEATRO DEBE SURGIR ( http://abelteatro.blogspot.com/2007/11/crispulo-gandara-cantor-popular-y.html )

Biografía de Críspulo Gándara



Críspulo Gándara (* Concepción 1883 - † 1971) fue un músico chileno, compositor e intérprete de música folclórica y popular.

Vida y obra

Nacido en Concepción, era hijo de obrero y el mayor de doce hermanos. Empezó a ganarse la vida a los doce años como aprendiz de hojalatero, labor que desempeñó hasta su muerte y que alternaba con la música.

En su juventud formó sus primeros conjuntos con otros guitarristas y cantores del lugar, animando fiestas y eventos populares. Su fama lograda como buen músico y payador lo llevó a probar suerte a la capital, Santiago.

Formaría posteriormente el grupo Los Huasos de Pichidegua, con quienes grabaría cerca de ochenta discos, con el sello Odeón. Con ellos recorrió el país, cantando en teatros y compañías de variedades. Entre sus temas más reconocidos estaban "Hundimiento del Angamos" (una de las más populares), "Corazón de bandido", "Como el trinar del jilguero", "El tonto 'el hueso", "Pobre loca", "Tu pobre negro jetón", etc. Hay más de 65 canciones registradas como de su autoría.

Cuando el trío de Los Huasos de Pichidegua se separó, Gándara formó otro conjunto bajo el nombre de Los Trovadores de Arauco, que pese a no ser tan recordado como el anterior, alcanzó el reconocimiento hacia fines de los años 30.

Luego volvió a su tierra, instalando sin éxito los restaurantes “El Jote” y “El Palmar”, aunque nunca abandonando su pasión. Destacadísimo payador, el 13 de noviembre de 1965 ganó el campeonato nacional de payadores que se realizó en la Casa del Deporte de la Universidad de Concepción.

En el año 1967 fue invitado a ser parte del elenco del film “Ocaso”, película de Hernán Takeda y que contó además con las actuaciones de Gabriel Alfaro, Oriana Espinoza, Carmen Varas, Mario Simonetti, Sergio Burger, Carol Vera y Blanca Parra.

En 1971 recibió una pensión de gracia, otorgada por el Congreso como reconocimiento a su contribución a la poesía popular y al folclore nacional, y como un premio por los ochenta y dos discos en que grabara payas y cantos de Chile.

Falleció el 5 de julio de 1971.

En la comuna de Hualpén, en su homenaje una población lleva actualmente su nombre.

fuente: Wikipedia